La eficacia de lo simple.
Durante la prueba a fondo de la Mawi 125 de AKT se nos hizo recurrente una expresión, la cual es perfecta para empezar esta prueba a fondo, pues siempre que nos deteníamos, la gente se acercaba y nos decía: “Dan ganas de manejarla” y curiosamente fue nuestra misma impresión al tenerla por primera ante nuestros ojos en vivo y en directo.
Al ver la Mawi 125 frente a ti, inmediatamente regresas en el tiempo, pero de buena manera, porque recuerdas los tiempos simples, tiempos sin muchas preocupaciones ni afanes y es una scooter que con su estilo evoca esa época, empezando con el chasis tubular expuesto en rojo que no va a ser indiferente ante la mirada de ningún usuario y con una serie de decoraciones en colores “vintage” en rojo, amarillo y naranja que le dan un toque de frescura al conjunto, que es reducido en tamaño pero con las proporciones adecuadas para suplir cualquier necesidad, la farola redonda con luz halógena y las direccionales redondas, que agradecimos mucho que fueran en LED terminan de completar ese estilo relajado de la moto.


En la prueba a fondo Mawi 125, pudimos comprobar que la moto se presta tanto para llevar acompañante como para usarla como herramienta de trabajo
Actitud Fresca
Al subirse en ella tienes una posición ergonómicamente tranquila, con los pies sobre el ‘piso’ de la scooter de manera plana y las rodillas a 90°, el manubrio tiene un particular estilo que se asemeja a esas «ciclas» veraneras antiguas que nos encogen un poco de hombros pero nos dan una gran maniobrabilidad y sobre todo un muy buen radio de giro donde podremos hacer giros en ‘U’ en zonas estrechas y nos permitirá escabullirnos entre el tráfico muy fácilmente; La espalda queda recta, si se es un piloto de alta estatura tendremos que encorvarnos un poco pero sintiéndonos a gusto sobre ella, el asiento es de un mullido justo y geometría muy buena, pues se puede pasar un buen periodo de tiempo sobre ella sin sentir fatiga. El copiloto encontrará un asiento también justo en dimensión pero que compensa con un buen relleno, para el acompañante, los posapies que son una extensión de la base delantera son algo pequeños pero cumplen con su propósito. El asiento del pasajero es desmontable para acceder a la parrilla de la moto; Una parrilla firme y de buen diámetro a la cual podremos adaptar cualquier tipo de elemento de carga para aquellas personas que así lo requieran para trabajar.
Bajo el asiento del conductor accederemos al tanque de combustible, abriendo desde el switch principal de la moto, no tendremos a disposición un baúl como en otras scooters pero en compensación encontraremos un tanque de combustible ‘generoso’ para el segmento, con una capacidad de 5 litros (1.3 galones aprox) con lo cual gozaremos de una autonomía estimada de 200 km antes de encender el aviso de combustible de reserva, pero tendremos a disposición un buen volumen de combustible mientras llegamos a una estación de servicio.
Con la Mawi 125 tanqueada iniciamos el recorrido. El monocilíndrico de 124,6 CC alimentado por carburador entrega muy bien los 7,1 caballos de potencia junto a sus 7,3 Nm de torque, no tiene una salida muy enérgica como la mayoría de scooters, pero su comportamiento es muy sereno en cualquier régimen y en cualquier condición, incluyendo faldas muy pronunciadas, las cuales no la detendrán. El motor no transmite vibraciones significativas, y en ningún momento de la prueba sentimos o escuchamos tapas o tornillos sueltos, la moto se percibe muy bien ensamblada y su sonido en funcionamiento es algo elevado, pero sin llegar a ser molesto. Cuando se encara el tráfico se mueve con mucha fluidez gracias a su pequeño tamaño y a su muy contenido peso de tan solo 78 kg en seco.
Mawi 125 Estética cautivadora.
Al transitar con ella notamos que desviaba miradas, pues la moto apenas se empieza a ver rodando en las calles y mucha gente se sentía curiosa por la pequeña scooter, en diversas ocasiones fuimos detenidos por muchos interesados que querían ver al detalle la moto, incluso agentes de la policía de carreteras que se quedaron detallando y hablando de la Mawi, que, en palabras de ellos la definieron como una moto “Simpática”. También durante la grabación del vídeo y las sesiones fotográficas tuvimos que parar varias veces para responder las preguntas de los transeúntes, pues en verdad querían saber de la moto y al final todos llegaban a la misma conclusión: “dan ganas de manejarla” y lo que más le gustaba a la gente era su sencillez pues muchos recordaban esas motos sencillas, pero tan funcionales de algunos años atrás.
La Mawi es una moto que se comporta bien, en medio de su simpleza nos deja ver una moto que se ganará un espacio por su economía y estética, así lo vivimos en la prueba a fondo, con las opiniones de la gente
Configuración Eficiente.
Actualmente estamos rodeados de tecnología y vehículos complejos por todas partes, y si bien eso hace parte de la evolución y de los avances que procuran facilitar nuestro día a día; no siempre significa que así sea, pues en ocasiones tener un vehículo con “lo último en guarachas” puede verse reflejado en servicio técnico especializado, repuestos específicos que deben esperar hasta meses para llegar lo que se traduce en costos de mantenimiento más elevados; Ahí es donde añoramos los tiempos de la mecánica simple, y es ahí donde la Mawi 125 entra a relucir, pues nos recuerda que a veces menos es más. La configuración de la Mawi es sencilla, pero bien pensada iniciando por ruedas de aleación de 10 pulgadas de 3 aspas tanto adelante como atrás, portando llantas de la marca ‘Kontrol’ de medida 3.00, mismas que nos sorprendieron gratamente pues no tuvimos sustos en ninguna superficie seca o húmeda y había que ser demasiado ‘agresivo’ con el freno como para sentir un derrape; La frenada fue otro buen punto a favor de la Mawi 125 ya que incorpora en la parte delantera un efectivo freno de disco, elemento que algunas competidoras de precio más elevado no traen, la frenada no es asistida ni tiene ABS pero sencillamente no le hace mucha falta para sus prestaciones.
En el apartado de las suspensiones tanto atrás como adelante funcionan con propiedad, el monobrazo trasero si hace tope un poco más fácil y en caso de enfrentar un bache o hueco de manera imprevista nos va a transmitir el golpe inmediatamente, la horquilla delantera si procura ser más ‘tolerante’ a las irregularidades de la vía.
Más que una solución de movilidad.
La Mawi 125 a pesar de su filosofía austera viene de serie con accesorios que nos facilitan la vida, como un porta celular de marca FP Fireparts y un cargador USB para nuestros dispositivos, con lo cual la scooter se fortalece para ser una compañera ideal como herramienta de trabajo. Junto al switch principal tendremos un gancho porta objetos y la capacidad de carga se complementa con el piso de la moto y la parrilla de la cual hablamos anteriormente; También encontramos a un costado una coqueta caja de herramientas asegurada por la llave principal, donde tendremos a disposición un par de llaves hexagonales, un extractor de bujia, una pinza y un destornillador de doble punta, lo justo y necesario para ajustar o reparar algún detalle en la Mawi.
El tablero sigue con la actitud fresca de la moto ofreciendo un panel ovalado con un único reloj análogo que nos indica la velocidad, tendremos un cuentakilómetros total, indicador de luces altas, direccionales y literalmente un foco LED que nos sugerirá cuando ir por combustible.
Para aquellas personas que deban desplazarse entre ciudades o municipios como es habitual en nuestro país ya sea por temas de trabajo, estudio o incluso esparcimiento, encontrarán en la Mawi una solución aceptable, pues al encarar tramos interurbanos o de carretera podremos transitar con ella a ritmos que no entorpecen el flujo del tráfico, con una velocidad tope de 80 km/h, aunque realmente la Mawi 125 podría entregar un poco más dependiendo de varios factores, pero sería enfrentarla a una exigencia que no merece y para la cual no fue diseñada.
¿Todo tiempo pasado fue mejor?
No necesariamente, y aunque AKT nos quiere transportar con la Mawi 125 a épocas donde la vida no era tan compleja, lo hace mediante una estética muy acertada y ‘atemporal’ ofreciendo soluciones en diferentes ámbitos, como transporte y trabajo, sin sacrificar aspectos tan importantes como la fiabilidad, la economía y la efectividad.
La Mawi ha llegado para recordarnos lo que es verdaderamente relevante en un vehículo y lo que debemos tener en cuenta a la hora de buscar una moto dependiendo de nuestras necesidades, sin dejar atrás un estilo que seguramente vamos a disfrutar en cualquier escenario urbano o en cualquier carretera de nuestra bella tierra.
AKT ubica la Mawi en un segmento muy apetecido y con un precio muy llamativo, siendo una de las Scooter más económicas del mercado. Al momento de la prueba la moto se ofrece en las vitrinas de la marca con un valor de $ 5 millones 490 mil Pesos, en 3 colores: Gris, blanco y negro.