Hay espacios para todos en las calles, por qué no podemos respetar los de los peatones, como en esta imagen donde el paradero de buses está copado por taxis, carros particulares y hasta motociclistas.
El tema de este viernes tiene que ver con motociclistas y peatones, un aspecto que ahora se podría escribir como Motociclistas Vs. Peatones, pues dejó de ser un compartir de espacios para una rivalidad por el espacio, generando problemas como la muerte de unos y otros.
El respeto por los demás no importa, ni siquiera en estos espacios especiales para las personas con movilidad reducida.
Siempre he dicho que antes de rodar debimos caminar, lo que implica quién tiene la prelación en la vía, pero eso no significa que lo que caminen puedan abusar de este privilegio evitando los semáforos peatonales o los puentes para ellos. Cuántas veces vemos que una persona mayor, trata de pasar una calle y nadie, absolutamente nadie (conductor) reduce la marcha para que el peatón pueda cruzar sin tener que hacer 100 metros planos; pero esto no solo ocurre con las personas mayores, también pasa con mujeres, niños, jóvenes, en fin todo tipo de peatones que ni en las zonas de cebras están seguras a la hora de pedir respeto y espacio tan solo en unos cuantos metros a los que tienen derecho y prelación en la calle.
Las cebras son espacios para los peatones y en este caso en Barcelona, los motociclistas tienen una prelación delante de los carros
Además de ser un vehículo muy práctico y divertido, la moto nos brinda mucha agilidad por lo que no tenemos que vivir a contrarreloj todo el tiempo, es por eso que muchos accidentes involucran motociclistas y peatones. Uno de los momentos donde más se ven estos incidentes es cuando los carros están detenidos en los semáforos o cuando les dan el paso a los otros carros en cruces, allí una moto no considera que la detención los incluye a ellos y se topan con un peatón que aprovecha el momento para cruzar y es arrollado por el impaciente motociclista que aparece entre los carros como la gran ola de un tsunami, o caso contrario el motociclista es embestido por el carro al que los otros le daban paso.
Amplían las vías, pero los peatones tienen que hacer los 100 metros planos a la hora de cruzar estas grandes avenidas o autopistas, arriesgando sus vidas. Reduce la velocidad para que ellos puedan pasar.
Cuando circulamos en carretera, no siempre hay cruces para los peatones, no hay semáforos y los reductores de velocidad se convierten en rampas de aquellos motociclistas que piensan que llegó la hora del motocross o el freestyle y simplemente saltan sobre ellos, en lugar de bajarle al acelerador, sin pensar en los niños que cruzan para ir a la escuela, o en las personas mayores que deben hacer maromas para aventurarse al deporte extremo que implica pasar una carretera. Pensemos en los demás a la hora de rodar en las ciudades, pueblos, municipios, barrios, si hay reductores de velocidad es por algo, si hay cebras es por que se necesitan, si los carros están detenidos hay un motivo para ello, no siempre podemos ser los primeros, no siempre que unos bajen la velocidad es la «oportunidad» para que lideremos el grupo, no se trata de una competencia, no se trata de llegar primero, se trata de llegar y de permitir a otros que también lleguen.
Nadie quiere esto y menos si es en las calles.
El punto de vista del peatón e incluso de otros conductores, con respecto a la velocidad de las motos en las calles no siempre es exacto, o por lo menos cercano al real por tratarse de un vehículo pequeño no podemos medir la velocidad con que circulan las motos y cuánto espacio tenemos para cruzar ya sea caminando, en el carro, o en otra moto, por ello hay un tema de seguridad que nos lleva a comprobar dos veces antes de hacerlo, mira y vuelve a mirar antes de pasar por delante de una moto.
Esta es solo una reflexión de viernes, cuando nos preparamos para disfrutar de nuestras motos fuera de las ciudades, pero con respeto, pues la vida de los motociclistas también está en juego… No querrás volver a casa como insecto en parabrisas o con un peatón en tu farola.
No hay por qué abusar de la moto, no se trata de un vehículo de carga y menos si no se hace notar la carga que se lleva a cuestas.