Si usted es de los que no cree que exista en Colombia una gata que viaja en motocicleta, escribe en un blog sus aventuras y es reportera felina de La Revista De Motos, entonces no va a creer que en un encuentro donde se reunieron 375 motociclistas regalaron una moto nuevecita, les hicieron revisión técnica completamente gratis a todas las motocicletas participantes y lo pasaron tan felices como cuando duermo en el sofá que el abuelo le regaló a mi dueña (ese que no araño nunca, solo lo rasco con amor).
Pues sí, eso sucedió frente a mis bigotes cronistas de gata siamés y se trató del Quinto Encuentro Apache RTR 2019 que se desarrolló dónde yo nací, el departamento del Huila.
Akira no pierde la oportunidad de salir en las fotos y más cuando se trata de su nota para De Motos
Él es Antonio, no tiene movilidad en sus piernas, pero la pasión por las motos es más grande y adaptó su TVS para poder viajar.
Allí además de sacar mi garra periodística para indagar acerca del evento y buscar una que otra lagartija, conocí moteros (así le llaman a los aficionados a estos vehículos) como Antonio Espinoza quien pese a no poder mover sus piernas llegó al motoencuentro, desde la ciudad de Cali, en su Apache 200 modificada con dos rueditas (como las de las bicicletas de los niños), que le permiten a este motociclista conducir de manera normal por las carreteras de Colombia y Ecuador, hasta donde ha viajado con su esposa; o a Diego Salazar, presidente del Club Apache Quindío, quién después de adquirir a Perla, su Apache RTR 180 modelo 2014, la cual tiene más de 100 mil kilómetros recorridos, se ha dedicado a facilitarle la vida a los motoviajeros diseñando remolques donde se pueden llevar carpas, maletas y hasta mascotas como yo, o más grandes.
De pronto le digo a la Crespa que me lleve en remolque…
Pero una cosa que me hizo levantar las orejas y centrar la atención en las tradicionales y aburridas reuniones de los humanos, fue el concurso de la moto que rodara más despacio,
-¿Whatttssssss?!!, fue lo primero que pensé -¿No se supone que las motos son para correr? ¿Acaso estas motos, que se fueron de rodada por Neiva y el desierto de la Tatacoa, no son más rápidas que la scooter de AKT en la que yo ando y que tiene por piloto a una Crespa que parece una tortuga por lo lenta?, pues sí y no, parece y según me explicó Juan Camilo Posada, el coordinador de Mercadeo de TVS, es que se buscaba divertir a la gente arriba de lo que más aman, las motos, por eso se inventaron concursos súper raros, donde, gracias al dios gatuno, ningún humano o animal salió lastimado; así como la rifa más crazy en la que se regaló una Apache 160 cuatro válvulas de cinco millones 500 mil pesos, que salió al mercado hace solo cuatro meses (no me pregunten qué es eso de cuatro válvulas, pues yo soy una simple gata).
¿Quién quiere ser el más lento en su moto?… No entiendo!!! Pero parece divertir a los humanos.
Y por si fuera poco a este encuentro en el que participaban motociclistas de todas partes del país (muchos de Medellín, Cali, Neiva, Pereira, Quindío, Bucaramanga y otros que no recuerdo), se sumaron 3 indios, pero no de los que vemos en el Amazonas, Putumayo o de los que acompañan al llanero solitario, sino los de la India, quienes quisieron de primera mano conocer lo que pensaban los usuarios de su moto, porque la TVS Apache es una moto india.
La «Cucha Biker» no se quedó con las ganas de cargarme.
Por último, como para no perder la costumbre, encontré un lugar donde frotarme y fue en las piernas de una motera más vieja que el abuelo, su nombre es Ligia Carmona, la llaman la ‘Cucha Biker’, tiene 60 años y una alma ‘full gas’ (apasionada por las motos y por la velocidad), transmitiéndole a sus hijos el amor por las dos ruedas, envolviendolos en un mundo donde las motocicletas tienen un estilo único, así como esta familia que se disfraza de diferente motivo año tras año en la Feria de las Flores, porque ella, es una paisa que además de amar los gatos, da posada a los moteros que pasan por su ciudad y enseña a quien conoce que no importa la edad, ni el color, ni la raza, ni el sexo, ni mucho menos la especie para salir de viaje en motocicleta y unirse en una sola pasión.
Por Akira,
@Mochigata
Gata viajera de 4 años y medio,
cazadora de lagartijas,
amante de arañar sofás
de rosarle la cola a desconocidas
y pedir comida a las 4:00 a.m
Bueno esto fue todo amigos de La Revista De Motos, esperamos volver a escribir para ustedes.