Las motos como protagonistas.
El 12 de julio se estrenará en cines la nueva película de la famosa saga de misión imposible, titulada: “Mission Impossible Dead Reckoning” protagonizada por Tom Cruise interpretando al intrépido e inagotable agente secreto ‘Ethan Hunt” al cual ya hemos visto realizar intensas persecuciones en moto en otras de sus películas como en MI6: Fallout a bordo de una BMW R nineT y una BMW S1000RR. Es importante recordar que Tom Cruise realiza todas las escenas de riesgo en sus películas, incluyendo las de motocicletas.
Pues bien, Mission Impossible Dead Reckoning no será la excepción en cuanto al shot de adrenalina motociclístico, pues la primera escena que se grabó para la película en el día uno de rodaje, es un impresionante salto base en paracaídas sobre un fiordo noruego ¡sin cables de seguridad! La escena fue la primera en ser grabada debido a que sería el punto de inflexión del rodaje, ya que, si salía mal con un Tom Cruise malherido o incluso fallecido, significaría el fin de la producción.
La moto:
Para el salto base en paracaídas sobre el fiordo, la moto elegida fue una Honda CRF 250R del año 2019 (la cinta fue grabada en 2020 en plena pandemia) una moto de cross de mucho torque y apta para este tipo de maniobras. Se usaron varias unidades de la moto ya que tras cada ensayo las motos que caían al vacío sufrían daños críticos por obvias razones. En la toma final la motocicleta fue pintada totalmente de negro, para ocultar la marca y referencia de la moto pues el sponsor oficial de la película es BMW.
El entrenamiento de Tom Cruise fue muy exhaustivo para el salto, tanto física como mentalmente. Pasó varias semanas ensayando en un rancho con una pista de motocross, adquiriendo habilidades de pilotaje sobre la moto y acostumbrándose a pequeños y medianos saltos, según cuentas realizó más de 13.000 saltos de entrenamiento en la pista sobre la moto y para el entrenamiento en paracaídas, realizó 500 saltos desde un helicóptero. Es de admirar el temple del actor pues para la fecha del osado salto, Tom contaba con 59 primaveras en su haber.
Los primeros intentos.
Se realizaron muchas tomas de ensayo antes de la toma final, con Tom Cruise y la CRF enganchados a un sistema de cables de seguridad. Todo se realizaba con un constante monitoreo y esperando las condiciones ideales para adquirir información, y obtener un trazado del salto lo más homogéneo posible para hacer la toma final.
El salto:
El momento crítico había llegado y aunque Tom ya ha realizado cientos de tomas impresionantes como sentarse en la cima del Burj Khalifa sin arnés, atarse a un avión en despegue entre muchas otras, el actor reconoce que esta escena ha sido su mayor reto a nivel de riesgo.
Llegó el día del salto para la toma final, no había cables de seguridad, casco, ni malla, eran solo Tom, la CRF, unos googles y su paracaídas. Y aunque la toma fue un éxito, tendrás que ir al cine para ver el resultado final en la pantalla grande.
Parece que es una Mission Impossible que Tom Cruise deje de hacer las escenas de riesgo
Más motos:
En el film también habrá más persecuciones en moto y en el tráiler se ha logrado ver que tendremos al agente Ethan Hunt maniobrando sobre una BMW G310GS de la ‘polizia’.
Tom Cruise y las motos son una historia de amor inseparable desde Top Gun en 1986 y como fanáticos siempre nos agrada ver escenas donde la moto se roba el foco de la lente.