Casi nunca hacemos en estas páginas artículos de opinión, no es lo usual, a menos que se trate del editorial de nuestra Revista. Pero en esta oportunidad hemos considerado prudente tomar acción para escribir algunas líneas sobre lo que hemos notado en las últimas semanas, pues creemos que es hora de hacer una llamado a la cordura y al respeto.
Desde hace días, el diario El Tiempo, ha compartido una serie de artículos enfocados a las motos. Los primeros de ellos relacionados con el incremento de las ventas de motos en Colombia, lo que plantearon como algo alarmante y en lo que había que poner un freno subiendo impuestos, complicando los trámites para la financiación e incluso hablando de peajes dentro de las ciudades para restringir su movilidad al interior de las mismas.
Sobre ese tema en particular escribimos una nota e hicimos un video. Allí expusimos nuestras opiniones y lo raro que era que algunos en época de elecciones volvieran a tomar las motos como su caballito de batalla. Incluso recordamos que a la hora de cobrar la pauta de las motos, todos olvidan sus rencillas con este medio de transporte y facturan sin problema.
Restricciones
Hoy, ante la situación planteada en Bogotá por la alcaldesa, Claudia López, vemos nuevamente al Tiempo haciendo eco, como es apenas lógico de la noticia. Pero lo que no nos parece para nada «sano» es el uso de algunas palabras en las que el autor estigmatiza a todos los motociclistas colombianos, al decir:
En todo el país pocos negarían que ante la súbita aparición de una moto con parrillero suelen dispararse tanto el miedo como la adrenalina. Jhon Torres Editor de El Tiempo @JhonTorresET
Ya hace años que la medida de restricción del parrillero ha demostrado que los delitos no se reducen, los criminales simplemente pasan de una a dos motos. Muchos de esos delitos ahora los cometen a pie, como vimos hace poco en las noticias, donde un par de jóvenes asesinaron a otro solo por llevarse su teléfono y abandonaron la escena del crimen corriendo, o es que ahora también van a restringirnos caminar de a dos.
Inseguridad
Es cierto que la delincuencia ha aumentado en Colombia, pero también hay que ver que en los taxis se cometieron y se siguen cometiendo muchos hurtos, secuestros express, incluso homicidios. Pero con los amarillos nadie se mete. Al igual que pasa con los buses donde cada día son más los afectados por estos delitos menores y no por ello prohíben su uso. Puede que este comentario suene ridículo, pero es así como se ven las restricciones a los motociclistas desde nuestra óptica.
Otra perla es esta de la Alcaldesa de Bogotá que dice:
Bogotá ha visto cómo los moto –ladrones-, los atracos, los sicariatos, 1 de cada 4 homicidios son los jueves, viernes y sábado” Claudia López
Ahora nos ponen una nueva etiqueta, Moto-Ladrones…
Lamentablemente, las ensambladoras se quedan en silencio ante estos ataques y quienes hacemos crecer su negocio nos quedamos a la espera de su apoyo.
Este es un llamado a la cordura, no somos los malos del paseo. Está bien tomar medidas, pero en todos los frentes, no solo con los motociclistas. La inseguridad está en muchos lados y las autoridades parecen centrarse sólo en las dos ruedas.
La pregunta final es ¿Quién está detrás de todo esto?
1 Comentarios
Totalmente de acuerdo , este medio de transporte es prácticamente obligatorio en Bogotá y estamos muy orgullosos de pertenecer a este gremio por su capacidad de adaptación y porque demostramos que en paz sin dañar los bines del distrito podemos manifestar nuestro descontento. Los motociclistas han creado una red de apoyo incondicional en contra de la delincuencia y aun así los estigmatizan . En época de elecciones se ve de todo pero con lo que no podemos estar se acuerdo es con el atropello a un gremio que ha crecido y ha beneficiado a todos incluido el distrito. Un saludo a Demotos Publimotos y Bimotos.