Royal Enfield Continental GT “AELLA”.
En Japón, el hogar de grandes marcas históricas de motocicletas, se llevan a cabo un sinfín de competencias de todo tipo; Una de ellas es el ACT18 de Tetsuma, una competencia donde se enfrentan máquinas de 2 cilindros refrigeradas por aire de 300 CC o más grandes. Ahí es donde nace esta historia de carreras japonesas con una twin liderando.
ACT18 de Tetsuma
Durante la competencia participan un sinfín de máquinas de diferentes marcas como BMW con sus boxer, Triumph con unos modelos anteriores de la Bonneville que eran enfriados por aire/aceite, las locales como Yamaha con las RD y Suzuki con motos con el conocido motor GS 500, entre otras.
Un equipo de carreras llamado “Motojunkie” decidió retar a las clásicas con un modelo moderno, pero de corte similar, escogieron la Royal Enfield Continental GT 650 como la retadora, pues creyeron en el potencial de la moto.
El equipo se puso manos a la obra y empezaron a hacerle modificaciones a la Continental GT650.
El equipo con la Royal Enfield antes de los toques finales para llevarla a las carreras japonesas
Lo primero era reducir el peso, se deshicieron de partes innecesarias, retiraron la farola e instalaron un semi carenado frontal para mejorar la aerodinámica, retiraron el sistema de escape de fábrica e instalaron uno nuevo también de doble salida diseñados desde cero y hechos a mano en acero inoxidable para reducir en casi 5 kg el peso y además mejorar la salida de los gases, reemplazaron la batería por una de litio, el asiento fue totalmente removido y en su lugar se instaló un colín con una espuma de alta absorción; La reducción de peso lograda fue de 25 kg, cifra muy buena, pues en las carreras cada gramo cuenta.
Las suspensiones delanteras fueron intervenidas para darles más rigidez, mejorar el rebote y las hicieron totalmente regulables, en el eje trasero las suspensiones Gabriel de serie fueron reemplazadas por unas espectaculares Ohlins de alto desempeño, ajustables en rebote y precarga, que no solo mejoran las capacidades de la moto, sino que le dan una visual hermosa.
Para frenar la máquina decidieron cambiar el freno de disco delantero por una de mayor diámetro de 320 mm, el disco trasero quedó igual, y cambiaron el sistema de frenos, de los Bybre por uno Brembo.
En las llantas mantuvieron las dimensiones de los rines de serie y cambiaron las Pirelli Phantom por otras Pirelli Phantom pero éstas últimas eran unas ‘Sport comp RS’ que eran las homologadas para la competencia, con un compuesto similar al ‘slick’.
Modificando el motor Twin
Era el momento de modificar el corazón de la Royal Enfield Continental GT, el motivo por el cual la eligieron, un motor de 648 CC refrigerado por aire y apoyado por refrigeración de aceite. Un motor con un gran sonido y con un muy buen torque. Los ingenieros japoneses hicieron un trabajo interdisciplinar e internacional pues, aunque suene irónico, ellos no contaban con las herramientas completas para mejorar el motor de la Continental GT. Primero contactaron a ‘S&S Cycle’ en Estados Unidos para que les suministraran el kit “Big Bore” que sube el cilindraje a 865 CC y aumenta la relación de compresión, pasando de los 9.5:1 de fábrica a 11:1, cifras muy significativas, también suministraron el filtro de aire de alto flujo y un árbol de levas más liviano y mejorado para ajustarse al kit de potencia. Con todos los nuevos componentes debieron recurrir a Race Dynamics en India para que les ayudaran con la puesta a punto y la configuración electrónica para optimizar el nuevo kit junto con el alto flujo de aire y la salida personalizada.
Toques finales
Para mejorar la ergonomía reemplazaron todo el sistema de reposapies de piloto, así como los manilares clip-on, por unos más largos pero de ángulo más cerrado, reemplazaron las maniguetas y mantuvieron el tacómetro original (regla de la categoría) instalaron una almohadilla en el tanque para proteger las partes ‘nobles’ del piloto. Mejoraron el sistema de reporteo de combustible, así como el escape de los gases del mismo. Finalmente pintaron la motocicleta de un tono negro, instalaron las calcas y la bautizaron ‘AELLA’. Era momento de correr.
Esta es la Twin que triunfa en las carreras japonesas
Hora de competir
La Royal Enfield ya había competido previamente en otros encuentros sin obtener resultados muy alentadores, pero todo era parte del proceso de ensayo y error por el que deben pasar los equipos para lograr el mayor rendimiento en sus máquinas. Durante el encuentro la Continental GT AELLA logró ubicarse nada más y nada menos que en la segunda posición de la general, demostrando que la Royal Enfield era un león dormido que solo necesitaba motivación. Habrá una serie de encuentros más entre julio y octubre donde el proyecto AELLA seguirá demostrando de qué es capaz.
Los pilotos y el equipo a cargo del proyecto AELLA expresaron que este es el primer paso para buscar una nueva competencia en Japón con esta nueva máquina, pues creen que merece su propia categoría ya que son máquinas de bajo costo y con posibilidades de modificación casi que infinitas, también esperan que a mediano/largo plazo llegue a tener una competencia internacional, pues varios países ya están poniendo a prueba las twins de Royal Enfield en los circuitos y recordaron que también pueden modificar la Interceptor 650.