Un espacio para nuestros lectores
Sabemos que la pasión por las motos siempre tiene un origen y queremos conocer el que llevó a nuestros lectores a disfrutar de las dos ruedas, es por eso que este día compartiremos las primeras historias que nos han llegado.
Esperamos que se animen a compartir las suyas en [email protected]
El primer protagonista es Sebastián Zamora
El gusto por las motos inició a los 15 años, cuando mi hermano mayor adquirió una Yamaha DT125, cuando me subió a dar una vuelta fue amor a primera vista y a primer olfato porque quedé cautivado por ese aroma a 2 tiempos. A pesar de que mi padre odiaba la idea de que yo comprara moto seguí enfocado en conseguir una, y así fue, con la ayuda de mi madre me compré una moto de 100 CC una Hero-<Honda Eco Deluxe. Fue mi escuela y primera compañera de aventura, la consentía como si se tratará de la más bella dama y le daba aceites y productos que hasta las más grandes deportivas de 1000 CC envidiarían. Luego subí de cilindrada a 125CC a una Honda CBF 125, después de leer un artículo de La Revista DeMotos que me convenció de adquirirla, y tenerla fue mejor de lo que La Revista me hizo creer.
Mi padre en su afán de verme lejos de una montura de 2 ruedas me obsequió un auto, que la verdad poco usé. Mi amor por las motos creció cuando empecé a viajar por Colombia en ellas, debí vender la CBF para realizar un viaje académico pero al regresar adquirí una TVS Apache 180 (primero leí los test drive y artículos de La Revista DeMotos para asesorarme y de nuevo la opción fue la correcta). ésta moto es hoy en día mi compañera de aventuras y en ella hago videos de mis viajes que comparto a través de YouTube y redes sociales. Mi novia y yo somos libres cada segundo que montamos en moto y pensamos que la ruta no va a tener fin porqué cada kilómetro que pasa es un nuevo paisaje que se queda para siempre en nuestra memoria.
Gracias y un gran saludo a todo el equipo de La Revista DeMotos.
Canal de Sebastián en YouTube, para quienes quieran ver sus videos
El turno es ahora para William Peña
Todo inicia de los recuerdos de mi infancia, imágenes que cursan mi mente sentado entre el tanque de una Coyote en las pierna de mi padre, en ese tiempo no existía seguridad y no se usaba casco, por lo tanto, podrán imaginar el recuerdo tan grato que pasa por mi mente.
Posteriormente mi padre cambió sus motos, dependiendo de las prioridades. Así me inicié, manejando a los 10 años un Yamaha 80, esas de canasta, semiautomática, luego una DT algo más complejo, por los cambios, eso fue como a los 14 años.Mi primera moto fue una Mini Bike 110cc, viendo el gusto por esta pasión mi madre accedió a que mi padre me comprara una moto de verdad, y fue una Suzuki GSR 600, el motivo fue el pico y placa y poder trasladarme a la universidad.
Cuando terminé mis estudios, se presentó la polémica si vender la moto y comprar un carro, que era el regalo de grado (un Mazda 3), o dejarla y compara un más económico (Twingo), pues decidí venderla y cambiarla por una Yamaha R6R, la cual disfruté y me acompañó durante 6 años, excelente moto, pero al final me canse de la posición y decidí cambiar.
En el momento tengo una BMW R 1200 GS. una moto espectacular, que sirve para todo, cómoda, potente, elegante, la última tecnología,, en fin. Ya completo un año con ella y creo que no la dejare. En mis proyectos no veo la necesidad de un carro, con el de mi esposa es suficiente, pero creo que necesito mas motos, mi proximo proyecto sera la nine T y armar una cafe racer.
La historia que viene a continuación es de Michael S. Rodas
Adquirí mi primera moto, una Auteco Boxer CT100, por la necesidad de desplazarme entre las ciudades de Armenia y Pereira, para ir a trabajar. Les tenía miedo y consideraba que eran peligrosas, pero luego todo cambió, descubrí lo que es gozar la libertad sobre las dos ruedas.
Actualmente soy propietario de una Kawasaki Ninja 300 y la utilizo solo los fines de semana para viajar a pueblos cercanos a Bogotá y también para viajar a mi ciudad natal Armenia (Quindío).
Soy entusiasta de viajes largos en moto y espero poder hacer un upgrade a 600cc próximamente.
Saludos
Y cerramos esta primera entrega con Daniel Álvarez
Quiero ser parte de los protagonistas DeMotos
Llegue al mundo de las motos por mi hermano mayor, él fue el primero de toda la familia en comprarse una y puede observar su gran utilidad, sobre todo en ciudades como Bogotá que viven bastante congestionadas. Al pasar los días me dio mucho interés, fui aprendiendo a manejar y conociendo acerca de sus componentes; de esta manera me enamore de las motos y decidí ahorrar para comprarme una. Mi primera moto fue una Bajaj Platino, muy económica en combustible y bastante suave en manejo.
Con el tiempo cambie de motocicleta, pase por una moto automática y finalmente me incliné por el estilo naked. Actualmente cuento con una KTM Duke 200 y hasta el momento creo que nunca dejaré de tener moto.
La cosas que me encantan de manejar moto es sentir libertad al manejarla, ser más exigente en el manejo por todas las variables como la estabilidad, el trazado de la curva, la velocidad entre otras; algo muy importante es poder salir con tus amigos y solo disfrutar del manejo, los paisajes, los climas porque finalmente la moto ya no es un medio de transporte para uno si no una emoción para poder relajarte y disfrutar del placer de ser solo uno (Máquina y Piloto) juntos en el camino.
Gracias