Valerie Thompson es una mujer que no le teme a la velocidad, actualmente posee el récord como la mujer más rápida del mundo. Pero esta vez, la noticia tiene que ver con la milagrosa salvada de la piloto en tierras australianas.
Con el fin de marcar el récord general de velocidad sobre dos ruedas, que hoy está en 605.11 km/h, Thompson viajó desde Estados Unidos hasta el continente australiano, concretamente a Lake Gairdner, para lograr su objetivo, pero el BUB 7, como se llama su «moto» no terminó nada bien tras el segundo intento, cuando a más de 552 km/h, Valerie perdió el control de la poderosa máquina, que literalmente voló por el aire y le tomó cerca de dos kilómetros detenerse.
Como dijo Valerie, «el BUB 7 no quedó en buen estado, pero por lo menos me ha protegido». A pesar de ser un accidente a gran velocidad, la piloto solo sufrió heridas leves. El lado positivo es que en el primer intento marcó un nuevo récord de velocidad, al marcar 528.62 km/h